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Edición Gracia.

Dios de toda gracia

Mas el Dios de toda gracia, que nos llamó a su gloria eterna en Jesucristo, después que hayáis padecido un poco de tiempo, él mismo os perfeccione, afirme, fortalezca y establezca.

1 Pedro 5:10 (RV1960)

Cambiador del Mundo: El Apóstol Pedro solamente escribió dos cartas como testimonio de todo lo que vivió y compartió con Jesús durante sus tres años y medio de ministerio con el Maestro, y más de treinta años que él compartió con los demás discípulos, hasta su muerte en Roma donde fue crucificado de cabeza por el malvado emperador Nerón.
*Pedro nos explica que él conoció la gracia de Dios a través de Cristo y desde el principio él se percató que vendrían luchas y padecimientos que solamente por la fe y la gracia de Dios, los discípulos iban a poder soportar. Pedro también aclaró que no sería por mucho tiempo todos estos sufrimientos y podemos asegurar que él se refería a estas pruebas temporales que no durarían para siempre, comparándolas con la eternidad en los cielos con Jesús.
*Entendamos que el propósito por el que Dios permite dichos padecimientos, es con el fin de perfeccionarnos en nuestra madurez y carácter, afirmando nuestra identidad, destino y legado, fortaleciendo nuestro espíritu para que nada nos pueda detener, turbar, ni desviar del camino y por último para establecernos firmes como hijos de Dios, llenos de Su gracia para que nada pueda movernos de nuestro llamado en Cristo.
La gracia que recibimos como cristianos nacidos de nuevo, se manifestará plenamente en el momento que nosotros nos detengamos de tratar de agradar a Dios en nuestra propia fuerza, y dicha gracia provocará que la santidad y el poder de Cristo vivan para siempre en nosotros, porque la gracia nos regala el poder de Dios para que nuestra vida ya no tenga tropiezo.
Hoy es tu día de salvación si decides arrepentirte y pedirle al Señor que te salve, perdonando todos tus pecados y regalándote la vida eterna con Él en los cielos (Romanos 10:8-13).
Cristo en nosotros nuestra esperanza de gloria y la victoria que nos permite cambiar el mundo (Colosenses 1:27, 1 Corintios 15:10, 57). Aleluya.
*Gracia.

Grace Edition.

God of all grace

But may the God of all grace, who called us to His eternal glory by Christ Jesus, after you have suffered a while, perfect, establish, strengthen, and settle you.
1 Peter 5:10 (NKJV)

World Changer: Apostle Peter only wrote two letters as testimony of all that he lived and shared with Jesus during His three and a half years of ministry with the Master and more that thirty years that he shared with the rest of the disciples until his death in Rome where he was crucified upside down by the evil emperor Nero.
*Peter explains to us that he knew God’s grace through Christ and from the beginning he realized that fights and sufferings will come that only by faith and God’s grace the disciples were going to be able to bare. Peter also made a point that all these sufferings would not be for a long time and we can assure that he was referring to these temporary tests that would not last forever, comparing them with eternity in heaven with Jesus.
*Let us understand that the purpose for which God allows these sufferings, is in order to perfect us in our maturity and character, affirming our identity, destiny and legacy, strengthening our spirit so that nothing can stop us, disturb us, or divert us from the path and finally to establish us firm as children of God, full of His grace so that nothing can move us from our calling in Christ.
The grace we receive as born again Christians will be manifested fully in the moment that we stop trying to please God in our own strength and such grace will provoke that the holiness and the power of Christ may live forever in us because grace gives us God’s power so that our lives may not have a stumble.
Today is your day of salvation if you decide to repent and ask the Lord to save you, forgiving all your sins and giving you eternal life with Him in heaven (Romans 10:8-13).
Christ in us our hope of glory and the victory that allows us to change the world (Colossians 1:27, 1 Corinthians 15:10, 57). Hallelujah.
*Grace.