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Edición Eternidad.

Tratemos con respeto a nuestros hermanos en la fe

No hagan nada por contienda o por vanagloria. Al contrario, háganlo con humildad y considerando cada uno a los demás como superiores a sí mismo. No busque cada uno su propio interés, sino cada cual también el de los demás. Filipenses 2:3-4 (RVC)

Cambiador del Mundo: Los hijos de Dios estamos llamados a sembrar la paz, la honra, el respeto y el amor de Cristo, cuando presentemos el evangelio que son las buenas nuevas, para que mucha gente se arrepienta, se entregue a Jesús y se salve (Mateo 28:19-20).
Los siervos de Dios hemos aprendido que nada de lo que hagamos durante nuestro llamado aquí en la tierra, sea con vanagloria o por contienda, porque ese no es el carácter de Jesús, al cual nosotros estamos representando aquí en la tierra, como cristianos nacidos de nuevo.
Por otra parte, un ministerio cristiano tiene que consolidarse en la honra y en el amor de los unos por los otros, tal como nos dejó el ejemplo Jesús con sus discípulos, a los cuales trató por igual no haciendo distinciones entre ellos, sea que se tratara de un humilde pescador como Pedro o de un importante publicano y cobrador de impuestos como Mateo, pues a ambos Jesús los trató por igual, con mucha paciencia y respeto.
Jesús nunca habló con presunción a ninguno de sus discípulos, al contrario, siempre les mostró humildad y paciencia y ahora eso mismo tenemos que imitar los ministros y siervos del evangelio.
Jesús nunca miró por lo suyo propio y eso le costó hasta la vida, El siempre miró por lo de los demás y nos ha dejado huellas claras para que también nosotros derramemos nuestra vida por nuestro prójimo, tratándolo como superior a nosotros. Aun un hombre samaritano le fue revelada esta honra por el prójimo al que rescató y hospedó hasta que fuera sanado (Lucas 10:33-37).
*Hoy es tu día para aprender honra, amor y respeto si te entregas a Jesús declarándolo tu Salvador, tu esperanza de gloria y victoria para vivir por la eternidad con Dios (Romanos 10:8-13, Colosenses 1:27, 1 Corintios 15:10, 57). Aleluya.
*Eternidad.

Eternity Edition.

Let us try with respect our brothers and sisters in the faith

Let nothing be done through selfish ambition or conceit, but in lowliness of mind let each esteem others better than himself. Let each of you look out not only for his own interests, but also for the interests of others.
Philippians 2:3-4 (NKJV)

World Changer: God’s children are called to sow peace, honor, respect and love of Christ when we present the gospel which are the good news, so that many people may repent and surrender to Jesus and save (Mathew 29:19-20).
God’s servants have learned that nothing of what we do during our call here on earth may be with vainglory or strife, because that is not the character of Jesus, whom we are representing here on earth, as born-again Christians.
On the other hand, a Christian ministry has to be consolidated in the honor and love of one another, just as the example Jesus left us with his disciples, whom he treated equally, not making distinctions between them, whether he was a humble fisherman like Peter or an important publican and tax collector like Matthew, because Jesus treated them both equally, with great patience and respect.
Jesus never spoke with presumption to any of his disciples, on the contrary, he always showed humility and patience and now it is our turn to do the same. We have to imitate the ministers and servants of the gospel.
Jesus never looked for his own and that cost him the life. He always looked for everybody else and has left us clear footprints so that we also may pour our lives for our neighbor treating him like a superior to us. Even a Samaritan man had this honor revealed to him by his neighbor whom he rescued and sheltered until he was healed (Luke 10:33-37).
*Today is your day to learn honor, love and respect if you surrender to Jesus declaring him your Savior, your hope of glory and victory to live for eternity with God (Romans 10:8-13, Colossians 1:27, 1 Corinthians 15 :10, 57). Hallelujah.
*Eternity.