To read the Devotional in English swipe down.
Edición Gracia.

Solo en Cristo hay sanidad

Jesús le dijo: Levántate, toma tu lecho, y anda. Y al instante aquel hombre fue sanado, y tomó su lecho, y anduvo. Y era día de reposo aquel día.

Juan 5:8-9 (RV1960)

Cambiador del Mundo: En la Biblia, relata la historia de Jesús llegando a Jerusalén donde se percató que en un estanque en Betesda había una multitud de enfermos entre ellos ciegos, cojos, paralíticos, que esperaban el movimiento del agua, porque un ángel descendía de tiempo en tiempo al estanque, agitaba el agua y el que la tocare quedaba sano de cualquier enfermedad.
Había un cojo que tenía treinta y ocho años enfermo y cuando Jesús lo vio acostado le preguntó: ¿quieres ser sano? Sabemos el final de la historia, que Jesús le sanó y ordenó tomar su lecho e irse.
Estoy seguro que si recordamos el día de nuestra conversión, también estábamos enfermos y esparcidos por las calles de este mundo, sin dirección ni propósito, pecando en contra de Dios y con un destino asegurado hacia el lago de fuego por la eternidad (Apocalipsis capítulo 20).
También a nosotros Jesús nos ordenó levantarnos y recoger nuestra vida que estaba destruida y darnos una segunda oportunidad para comenzar de nuevo, creyendo en su nombre, recibiéndolo en nuestro corazón, aprendiendo en su palabra la Biblia el verdadero propósito por el que fuimos creados y puestos aquí en la tierra, para caminar en santidad y dando testimonio a todos, de las maravillas que Dios está haciendo en nuestra vida porque ahora somos sus hijos.
*Cualquier persona podrá por gracia entender que no estamos hablando religión sino de una relación personal con Cristo y que Él es el único que hace milagros, restaurando vidas y familias que estaban sin dirección ni esperanza.
Jesús es el único camino para regresar a una relación personal con Dios Padre y no hay otro nombre dado a los hombres en el que podamos ser salvos (Juan 14:6, 1 Timoteo 2:5, Hechos 4:12).
Hoy es tu día de salvación para que Cristo sea tu esperanza de gloria y victoria para cambiar el mundo (Romanos 10:8-13, Colosenses 1:27, 1 Corintios 15:10, 57). Aleluya.
*Gracia.

Grace Edition.

Only in Christ there is health

Jesus said to him, “Rise, take up your bed and walk.” And immediately the man was made well, took up his bed, and walked. And that day was the Sabbath.
John 5:8-9 (NKJV)

World Changer: In the Bible, it tells the story about Jesus arriving Jerusalem where he realized in a pool in Bethesda there was a multitude of sick people, among them blind, lame, paralyzed, who waited for the movement of the water, because an angel descended from time to time into the pool, stirred up the water, and whoever touched it was healed from any disease .
There was a lame man who was thirty-eight years old and when Jesus saw him lying down he asked him: do you want to be healed? We know the end of the story, that Jesus healed him and ordered him to take up his bed and leave.
I am sure that if we remember the day of our conversion, we were also sick and scattered through the streets of this world, without direction or purpose, sinning against God and with an assured destiny towards the lake of fire for eternity (Revelation chapter 20 ).
Jesus also ordered us to get up and pick up our life that was destroyed and give us a second chance to start over, believing in his name, receiving him in our hearts, learning in his word the Bible the true purpose for which we were created and placed here on earth, to walk in holiness and testify to all, of the wonders that God is doing in our lives because now we are his children.
*Any person will be able, by grace, understand that we are not talking about religion but a personal relationship with Christ and that He is the only one that does miracles, restoring lives and families that were without direction or hope.
Jesus is the only way to go back to a personal relationship with God the Father and there is no other man given to men in which we could be saved (John 14:6, 1 Timothy 2:5, Acts 4:12).
Today is your day of salvation so that Christ may be your hope of glory and victory to change the world (Romans 10:8-13, Colossians 1:27, 1 Corinthians 15:10, 57). Hallelujah.
*Grace.