Afirma mis pasos en tu palabra, y que ninguna iniquidad me domine. Rescátame de la opresión del hombre, para que yo guarde tus preceptos.

Salmos 119:133-134 (LBLA)

Cambiador del Mundo: Solamente Cristo en nosotros, puede ordenar nuestros pasos con Su Palabra la Santa Biblia, para que ninguna iniquidad se enseñoree de nosotros, solamente Cristo en nosotros, puede librarnos de la violencia de los hombres y permitirnos guardar Sus mandamientos. Por eso nuestra boca tiene que bendecir a Dios en todo tiempo, y Su alabanza tenemos que proclamarla día con día. Todo lo que hagamos en nuestra vida debe darle gloria al Todopoderoso, nuestro testimonio debe engrandecer Su Nombre y exaltar a Dios a cada instante, porque esa es Su voluntad, que Él sea Rey y Señor nuestro, y nosotros templo de Su Espíritu Santo (2 Corintios 6:16). El vacío que había en nuestras vidas, se llenó el día que nos entregamos a Jesús, cuando El vino a nuestro corazón y nos libró de todas nuestras angustias. Cada uno de nosotros tiene que dar gracias al Señor por habernos librado de la muerte eterna, porque para ahí nos dirigíamos, sabiendo que al acabar nuestra vida en la tierra, nos presentaríamos ante el tribunal de Cristo para dar cuenta de todos nuestros hechos que por supuesto sin Dios en nosotros, nadie podrá ser salvo (2 Corintios 5:10). El Apóstol Pablo, habló de que antes caminábamos en lo oculto y vergonzoso y andábamos con astucia engañando, pero un día se nos manifestó la verdad y ese fue el momento cuando Jesús entró a nuestra vida y ahí fue cuando renunciamos a lo que éramos. Antes de ser cristianos nacidos de nuevo, el Evangelio para nosotros estaba encubierto, pues no veíamos ni entendíamos nada, andábamos como mucha gente de este mundo, con el entendimiento cegado, como los incrédulos a los cuales no les ha resplandecido la luz del Evangelio. Gracias al Señor porque ahora vemos claramente, por nuestro llamado y por la vida nueva que nos ha dado en Jesús lleno de Su amor, paz, misericordia y excelencia que nos ha permitido caminar y cambiar el mundo (Romanos 6:1-11, 2 Corintios 4:1-6). Aleluya.

Direct my steps by Your word And let no iniquity have dominion over me. Redeem me from the oppression of man, That I may keep Your precepts.

Psalms 119:133-134 (NKJV)

World Changer: Only Christ in us can ordain our steps with His Word the Holy Bible so that no iniquity will rule over us, only Christ in us, can free us from the violence of men and allow us to keep His commandments.
That is why our mouth has to bless God at all times, and His praise we have to proclaim it day by day. Everything we do in our lives should give glory to the Almighty, our testimony must magnify His Name and exalt God at every moment, because that is His will, that He be our King and Lord, and we temple of His Holy Spirit (2 Corinthians 6:16).
The emptiness in our lives was filled the day we surrendered to Jesus when He came to our hearts and delivered us from all our anxieties. Each one of us has to thank the Lord for having freed us from eternal death, because that is where we were heading, knowing that at the end of our life on earth, we would appear before the court of Christ to give an account of all our facts that of course, without God in us no one can be saved (2 Corinthians 5:10).
Apostle Paul spoke that before we walked in the hidden and shameful and we were cunningly cheating, but one day the truth was revealed to us and that was the moment when Jesus entered our life and that was when we renounced what we were.
Before being born again Christians, the Gospel was covered for us because we didn’t see nor understood anything, we were with many people of this world, with blinded understanding, like unbelievers to whom the light of the Gospel has not shone.
Thank the Lord because now we see clearly, for our call and for the new life He has given us in Jesus full of His love, peace, mercy, and excellence that has allowed us to walk and change the world (Romans 6: 1-11, 2 Corinthians 4: 1-6). Hallelujah.